En muchos países del mundo se ha determinado inmunizar a las niñas y niños contra el Covid-19, esto con fundamento en estudios que demostraron un alto índice de aceptación en el sistema inmunológico de los más jóvenes.
Sin embargo en México la Secretaría de Salud no ha comunicado una campaña de vacunación que contemple a las niñas y niños menores de 12 años. El primer paso que se llevó a cabo para inmunizarles fue anunciar que se vacunarían a quienes padezcan comorbilidades.
A partir del mes de octubre del año pasado se empezaron a vacunar a niños y adolescentes contra COVID-19 que padecen alguna enfermedad crónica, por ser más susceptibles a desarrollar la forma grave de la infección por SARS-CoV-2.
Como el resto de la población, los niños y adolescentes se tuvieron que registrar en la página mivacuna.salud.gob.mx para tener su cita y acudir el día y hora señalados para recibir su vacuna.
A partir del 30 de noviembre del 2021, inició la vacunación para adolescentes de entre 15 a 17 años sin comorbilidades.
Más adelante se decidió que se vacunaría a las y los adolescentes mayores de 15 años sin el requisito previo acerca de que estos padecieran las enfermedades descritas en el comunicado oficial.
En este panorama también se ha contemplado el regreso a clases parcial o total de los niños. La opinión de los padres de familia se encuentra polarizada.
Pues algunos padres coinciden en la necesidad de que los menores regresen a clases presenciales en pro de su bienestar emocional y salud mental. Sin embargo son más vulnerables al contagio y transmisión al no tener vacunas.
Si bien los infantes son menos propensos a desarrollar una enfermedad grave por coronavirus existe el riesgo de complicaciones, además de que su sistema inmunológico continúa en desarrollo.
Se han presentado casos de niñas y niños intubados y que han fallecido por coronavirus grave.
Al igual que en la población adulta, algunos menores no presentaron efectos secundarios, otros presentaron dolor, enrojecimiento e hinchazón en el brazo donde se aplicó la dosis. También sintieron cansancio, dolor de cabeza, escalofríos, fiebre, dolor muscular o náuseas. Efectos que desaparecieron a los pocos días.
Según un especialista en salud entrevistado por Conecta, existe la posibilidad de que los menores de edad tengan efectos adversos mayores, pero al no ser de un riesgo suficientemente grave, no se desestima la seguridad de la vacuna.
En los ensayos clínicos de Pfizer y Moderna, en un porcentaje muy bajo de menores de edad se observó un efecto adverso que no se ha visto en la población adulta.
Se trata de miocarditis y pericarditis, una inflamación de la capa que recubre el corazón, así como también un tipo de inflamación de los músculos cardíacos, pero que desaparece solo o tomando algún antiinflamatorio. Sin embargo, la vacunación es segura de acuerdo con informes de Pfizer.
Reportes preliminares indican que la dosis para niños de entre 5 y 11 años será menor a diferencia de la que se aplicó a los adultos y niños y adolescentes de entre 12 y 17 años. Ya que mientras a los adultos se les inoculó 30 microgramos, los menores de edad solo requerirán 10 microgramos en cada dosis separada por 28 días.
La vacuna tuvo buenos resultados en los menores de 12 años y hasta los 5 años, pero como se va viendo cuáles son las edades que van tolerando la vacuna, se avanza poco a poco; por lo que se espera que pronto esté disponible una vacuna para los menores de 5 años.
Fuentes: Plan Seguro, Secretaría de Salud, OMS.