Es muy común recibir llamadas inesperadas en relación a deudas con instituciones bancarias, pues estas suelen contratar despachos externos que se encarguen de ofrecer sus productos o servicios así como de la cobranza con clientes morosos.
Lo cual puede resultar muy molesto para los usuarios de los servicios financieros. A pesar de que utilizar agentes externos para la gestión de la cobranza no es ilegal, sí existen prácticas que no son permitidas por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
A través del Registro Público de Usuarios (REUS) y el Registro de Despachos de Cobranza (REDECO) la Condusef regula la operación de estos despachos, pues su función es evitar que los usuarios reciban llamadas molestas de parte de las instituciones bancarias así como para denunciar malas prácticas.
Para evitar recibir llamadas promocionales de las instituciones financieras el usuario debe registrarse en REUS a través de una llamada telefónica (800 999 80 80) o directamente en el sitio web de la Condusef.
Se puede registrar un número de teléfono móvil y uno local (personales), un número de teléfono móvil y uno fijo (laborales); así como un correo electrónico. El registro quedará vigente por dos años.
Con este registro se alude al derecho a la privacidad, en caso de que las llamadas continúen el usuario podrá poner una queja ante la Condusef mediante REDECO, puedes hacer a través de este enlace.
El REDECO es una herramienta para que los usuarios denuncien a los despachos de cobranza que gestionan la comunicación por parte de las instituciones financieras.
Los despachos en los que traten de forma irrespetuosa, amenacen o amedrentan a los clientes pueden ser demandados por estos, también si se comunican fuera del horario permitido (7am-10pm).
Otra razón por la que se puede levantar una denuncia es si estos pretenden gestionar cobros a terceros, si envían documentos que aparenten ser escritos judiciales o reciben por cualquier medio y de manera directa el pago del adeudo.