Un ajustador público de seguros tiene la función de auxiliar al asegurado con la reclamación de un siniestro catastrófico. Para que el asegurado reciba la suma indemnizatoria correspondiente al siniestro ocurrido.
Los ajustadores públicos son independientes, es decir que no pertenecen a una compañía de seguros. Son el intermediario entre los asegurados y las aseguradoras. Son reclamadores profesionales.
Los ajustadores públicos tienen la responsabilidad de proteger los intereses de los asegurados en una reclamación de seguros contra una pérdida con la compañía aseguradora.
Por lo que los asegurados recurren a estos cuando no han podido obtener una respuesta satisfactoria a través de su agente de seguros.
Los ajustadores profesionales se enfocan en el ramo de Daños en el que existen riesgos marítimos, agrícolas, ganaderos, automovilísticos, incendios, entre otros.
La formalidad de esta profesión se reconoció el 4 de abril de 2013 y este reconocimiento comenzó a tener efectos, bajo la Ley de Instituciones de Seguros y de Fianzas, dos años después de acuerdo con la Revista Siniestro.
La diferencia principal entre el ajustador de seguros que trabaja para una aseguradora y el independiente es que el primero vela por los intereses de la compañía y el segundo se enfoca en los intereses del asegurado.
“El ajustador de compañía debe hacer un ejercicio de autocrítica para aceptar que no está facultado para subsanar y corregir el reclamo recibido del asegurado, sino que “ajusta” en consecuencia, incluso cuando sabe que está causando un perjuicio al no aceptar la totalidad de los derechos asegurados en el contrato de seguro.”
…En el extremo opuesto se encuentra el ajustador público, quien, mediante su conocimiento y capacidad técnica, contable y jurídica, puede ayudar al afectado a perfeccionar todos y cada uno de los derechos emanados del contrato suscrito.
Fuente: Carlos Zamudio, de Mexico Claims and Risk Management, en entrevista para Revista Siniestro.
En México por lo general los agentes de seguros son quienes se encargan de llevar a cabo el procedimiento de reclamación por siniestro a las compañías de seguros. Sin embargo, en caso de siniestros catastróficos o complejos puede recurrirse a un ajustador público.
En estos casos es el reclamador quien se encarga tanto de evaluar el daño como de enfrentar a diario a la contraparte, los peritos de la aseguradora.
En primera instancia al tener un siniestro se debe contactar al agente de seguros para que interceda por el asegurado con la compañía de seguros. En caso de que no se obtenga una respuesta satisfactoria puede recurrirse a un ajustador de seguros público.